Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, en España hay 1.230.000 personas con una discapacidad auditiva de distinto tipo y grado. Alrededor de 100.000 personas tienen sordera profunda.

La modalidad preferida para comunicarse es la lengua oral ya que casi el 98% de las personas con problemas auditivas la utiliza, mientras que la lengua de signos es utilizada por 27.300 personas, que representan un 2.2%.

Situación socioeducativa de las personas con sodera en España

Clasificación según rangos de edad:

  • 0-6 años:  el diagnóstico de la sordera se realizó antes del primer año de vida. Son los que reciben apoyos de mayor intensidad dirigidos a la rehabilitación logopédica. Asimismo es el grupo que, en mayor medida, utiliza apoyos a la comunicación oral en casa y en las sesiones logopedia. Más de la mitad de los niños son implantados cocleares. El 85% se comunica en lengua oral y, a partir de los 4 años de edad, el 91% tiene como lengua de comunicación la lengua oral para afrontar su escolaridad.
  • 7-11 años: la edad media de diagnóstico son los dos años de edad. La mayoría sigue con normalidad su desarrollo académico, estando en el curso que le corresponde por edad, sin apenas repetición. El 95% se comunica en lengua oral. En general, no se encuentran limitados por su discapacidad para realizar actividades culturales ni deportivas, dentro o fuera del centro educativo. Es también el grupo donde más se percibe la aceptación y sensibilización de sus propios compañeros.
  • 12-17 años: es donde se encuentra el mayor número de casos en los que la sordera se presenta asociada con otra discapacidad. Este hecho, junto a la circunstancia de que se encuentran cursando la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) puede explicar que los datos muestren que una porción de ellos ha repetido curso. Son los que mayor uso hacen del sistema de frecuencia modulada (FM) en el aula. El 89% de ellos se comunican en lengua oral. Son las edades en las que se ponen de manifiesto dificultades de aceptación entre los compañeros del centro educativo.
  • 18-26 años: el 91% se comunica en lengua oral, dato que sube hasta el 95% en los casos de los universitarios. Los jóvenes se muestran críticos respecto a la cualificación del profesorado, al que atribuyen falta de formación. Asimismo, se manifiestas críticos con la carencia de medios de apoyo a la comunicación oral. En este grupo se aprecia una evolución relevante en sus intereses u competencias profesionales. Prefieren el estudio de carreras vinculadas al ámbito educativo y sanitario. La mayor parte de los que están trabajando lo hacen en empresa ordinaria y la gran mayoría no ha encontrado ningún problema para desempeñar su actividad laboral.
  • Mayores de 27 años: un estudio de FIAPAS sobre la Inserción Laboral de Personas Sordas sitúa en un 41% la inserción de personas con sordera profunda, de un 25% en las que tienen sordera severa, 64% con sordera prelocutiva bilateral y un 45% tiene reconocido entre el 40-65% de grado de discapacidad. Además el 66.6% ha recibido logopedia y el 68.4% utiliza prótesis auditivas. El 63% se comunica mediante lengua oral, el 8% en lengua de signos y el 29% con ambas modalidades. El 44.4% posee estudios de secundaria y el 13.5% estudios universitarios.

Fuente: ‘Libro Blanco sobre implantes en adultos y ancianos’